«Empecé a sentir un malestar general y fui a realizarme un electrocardiograma, pero estando en el hospital sufrí un infarto. A raíz de esto, mis pulmones y riñones fallaron; debido a la gravedad, me indujeron el coma, pero durante la intubación perdí mucha sangre. Mi corazón solo funcionaba al 20 % y me dieron pocas posibilidades de sobrevivir: le dijeron a mi familia que se despidieran de mí.
Como ya asistía a la Universal, le había enseñado a mi familia a usar su fe, por ello, mientras estuve sedada, ellos me ungían con el agua consagrada y oraban a Dios por mi recuperación. Su confianza en Él trajo resultados porque de un momento a otro desperté, los especialistas quedaron muy sorprendidos.
Al salir del hospital, dijeron que tardaría en hablar mínimo 6 meses, y que llevaría una vida limitada. No obstante, seguí usando mi fe y a los pocos días pude hablar. Ha pasado un año del incidente y en las revisiones siempre salgo muy bien de salud.» -Rosa Hernández
Reunión de Sanidad
Si estás pasando por una enfermedad, sea cual sea, puedes hacer uso de tu fe para determinar el bienestar de tu salud.
Te invitamos a participar en la Reunión de Sanidad. El encuentro tiene como objetivo enseñar a las personas a usar su fe para cambiar su situación de salud. Te esperamos todos los martes, especialmente a las 7 p. m., en la Universal más cercana.
(*) La Universal aclara que todos los conceptos emitidos en este sitio web, así como la programación de radio y de televisión, son cuestiones de fe, en modo alguno deben ser interpretados como elementos con atribuciones terapéuticas, sin demérito de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJES DE CONSULTAR A TU MÉDICO.